
¡Uy, esta foto es oro puro de los 80! Es como una cápsula del tiempo de la moda desatada. Los jerséis a juego, las gafas grandes, las permanentes redondas… es como un viaje al pasado, a los días en que MTV reinaba en el mundo. Y no olvidemos las poses: la mamá y la hija claramente se sienten fabulosas con sus atuendos a juego.
Es como si estuvieran a punto de sacar unos pasos de baile sincronizados al ritmo de “Girls Just Want to Have Fun”. La permanente de la mamá es tan grande que parece que esconde un animalito ahí dentro, y la permanente de la hija es una obra de arte en sí misma. Esta foto podrá ser un poco vergonzosa para algunos, pero para estas dos, es una insignia de honor.