Un bronceado inesperado
Muchas familias aprovechan las vacaciones para desconectar de la rutina diaria y reconectar con la naturaleza. Sin embargo, no todas estas experiencias son agradables para todos los involucrados, como lo demuestra una curiosa foto de una familia. Si bien estas escapadas a la naturaleza pueden conllevar pequeños percances como quemaduras solares, la imagen de este miembro de la familia es bastante particular. Muestra una quemadura solar inusual que se produjo al desayunar al aire libre: se ven claramente las marcas de un plato y cubiertos en la piel.
Este incidente demuestra con humor que desayunar bajo el sol abrasador quizás no fue la mejor idea. También arroja una luz interesante sobre cuán intenso debe ser el sol para dejar huellas tan precisas mientras la comida todavía está en la mesa. Afortunadamente, este tipo de quemaduras solares suelen ser inofensivas y se curan en pocos días, por lo que no son necesarias medidas de salud graves. Sin duda, esta historia se recordará durante mucho tiempo y se contará como una anécdota divertida en las reuniones familiares.