Yoga con tu amigo de cuatro patas


¿Quién no sueña con tener a su propio compañero de yoga de cuatro patas? Este adorable peludo no solo demuestra un trabajo en equipo perfecto, sino que domina los ejercicios con una gracia que a muchos humanos les falta. Mientras su dueña se estira, él demuestra que el yoga no es un deporte canino… ¡excepto quizás para él!

Esta tierna escena muestra por qué los perros son los compañeros de entrenamiento perfectos. No solo motivan con su presencia, sino que también aportan una dosis extra de diversión a cada sesión. ¡Quien entrena con un compañero tan fiel, seguro que nunca más querrá faltar a una clase!

Advertisements
Advertisements