Buscando Reafirmación


Impulsado por la ansiedad, el padre finalmente decidió hablar. Se acercó a una de las enfermeras del día del parto y, con cautela, compartió sus preocupaciones. “Hay algunas cosas que no terminan de encajar”, empezó, inseguro de cómo sería recibido.

La enfermera le ofreció una cálida sonrisa y palabras tranquilizadoras, explicando que cada recién nacido es diferente. Incluso el médico hizo eco de esta reafirmación. Pero el padre salió de la conversación más inquieto que consolado; su instinto le decía que había algo más profundo.

Advertisements
Advertisements