Julián decidió visitar su antiguo pueblo natal, alegando que era para una reunión del instituto. El lugar que una vez había sido su hogar se había desvanecido en un recuerdo lejano con el paso de los años. Pero ahora, había llegado el momento de regresar y enfrentar el pasado, una decisión que lo llenaba tanto de nostalgia como de incertidumbre.
Mientras hacía las maletas, Julián no podía sacudirse la mezcla de emociones que lo invadían. “Es solo una reunión”, se decía a sí mismo, pero en el fondo, sabía que este viaje era algo más que eso. Estaba buscando un cierre, y este viaje era el primer paso para encontrarlo.