17 fotos salvajes y descaradas sin censura

Combates encarnizados

En este ring, la belleza no importa, sino la dureza, y estas atletas demuestran que tienen ambas en abundancia. La idea de que los hombres no pueden golpear con fuerza a las “mujeres guapas” es cosa del pasado: en el deporte, solo cuenta el rendimiento. Ambas boxeadoras demuestran que la fuerza y la técnica no tienen género.

Sus movimientos son precisos, sus patadas están llenas de energía, una impresionante prueba de la profesionalidad en las artes marciales. La belleza de una boxeadora no reside en su apariencia, sino en la disciplina con la que se enfrenta a su oponente. Es hora de superar los prejuicios sobre el género y la apariencia: en el ring, todos son iguales, y la mejor atleta gana, independientemente de su apariencia.

Advertisements
Advertisements