¿Reclamo de Equipaje o Escenario de Circo? ¿Por Qué No Ambos?
En el mundo habitualmente mundano del reclamo de equipaje, un par de viajeros decidieron transformar la frustración en arte escénico. Con uno tumbado sobre la cinta transportadora de equipaje y el otro perfectamente equilibrado sobre sus pies en plena gloria de acroyoga, esta escena se parece más a un número de circo ambulante que a las secuelas de una maleta perdida. Su elección del lugar, una cinta transportadora giratoria, añade suspense y espectáculo, captando la atención de los pasajeros cercanos y haciendo girar cabezas por las razones correctas.
Ya sea que su equipaje realmente se haya extraviado o que simplemente tuvieran tiempo extra (y flexibilidad) de sobra, este dúo trajo entretenimiento inesperado al rincón más pasado por alto del aeropuerto. Las expresiones de desconcierto de los espectadores en el fondo lo dicen todo: algunos claramente entretenidos, otros confundidos y al menos uno cuestionando su propia cordura viajera. Si el reclamo de equipaje generalmente significa esperar aburrido, estos dos lo han redefinido como el escenario para la creatividad espontánea.